domingo, 3 de junio de 2012

Sonrisas de cuerpo entero.




Cuando el cuerpo se llena de sonrisas,
se desborda de risas hasta el alma,
el ritmo del reloj pierde la calma
y del amor renacen las cenizas.

El mar y el viento en sus salinas brisas,
sin pedir permiso bailan la palma,
con leve mueca el corazón se ensalma
y late enamorado con sus prisas…

que nada lo detiene, y de igual modo,
corre a llenarse de sonrisas todo
hasta pulsar felices carcajadas…

hasta el instante en que serenamente,
junto al suyo siente lo que el cuerpo siente,
de luces y sonrisas sus cascadas.

Jesús Peñalver





No hay comentarios:

Publicar un comentario